Diferencia entre revisiones de «Tonalá, Jalisco»

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En el año 2005 fue un año de prueba para el hermano Marcos Gaona. Al inicio del año, había invitado a la iglesia a realizar una serie de ayunos, que consistía en ayunar varias semanas, ayunando una semana y descansando otra hasta cumplir cuatro semanas de ayunos. Su hijo mayor Marcos Gaona Pérez  que contaba con 17 años de edad enfermó de una enfermedad que le quitó las fuerzas de los brazos primero y después las piernas dejándolo en silla de ruedas, fue duro golpe para la familia Gaona, además que dirigía la alabanza en los cultos.  Comenzó con los síntomas el 22 de febrero, no podía mover el dedo gordo de la mano derecha, el siguiente día batalló para subir las escaleras del edificio pues vivían en el cuarto piso. El día 24 ya no fue a la escuela porque ya no tenía fuerza en sus piernas.
En el año 2005 fue un año de prueba para el hermano Marcos Gaona. Al inicio del año, había invitado a la iglesia a realizar una serie de ayunos, que consistía en ayunar varias semanas, ayunando una semana y descansando otra hasta cumplir cuatro semanas de ayunos. Su hijo mayor Marcos Gaona Pérez  que contaba con 17 años de edad enfermó de una enfermedad que le quitó las fuerzas de los brazos primero y después las piernas dejándolo en silla de ruedas, fue duro golpe para la familia Gaona, además que dirigía la alabanza en los cultos.  Comenzó con los síntomas el 22 de febrero, no podía mover el dedo gordo de la mano derecha, el siguiente día batalló para subir las escaleras del edificio pues vivían en el cuarto piso. El día 24 ya no fue a la escuela porque ya no tenía fuerza en sus piernas.
El pastor y su esposa y otros hermanos (incluso de E.U.) estuvieron en ayunos para que Dios hiciera el milagro de sanarlo. La esposa del pastor la hermano María de la Luz le dijo a Dios, “voy ayunar 40 días para que sanes a mi hijo, y si no lo sanas voy a seguir ayunando hasta que lo sanes”, las noches se hicieron de llorar y orar  y Dios hizo el milagro, los doctores no sabían cómo curarlo (decían que era un Guillen Barret), a los 15 días de que empezó la enfermedad Dios los sanó, las fuerzas comenzaron a regresar a sus piernas y brazos, a los 30 días ya estaba completamente sano, el primer doctor que lo había revisado le dijo “esto es algo grande” esto sirvió para que Marcos decidiera ser bautizado en el nombre de Jesucristo. La hermana Luz cumplió con los 40 días de ayuno, aun cuando su hijo ya estaba sano. (Marcos sigue dirigiendo la alabanza).
El pastor y su esposa y otros hermanos (incluso de E.U.) estuvieron en ayunos para que Dios hiciera el milagro de sanarlo. La esposa del pastor la hermano María de la Luz le dijo a Dios, “voy ayunar 40 días para que sanes a mi hijo, y si no lo sanas voy a seguir ayunando hasta que lo sanes”, las noches se hicieron de llorar y orar  y Dios hizo el milagro, los doctores no sabían cómo curarlo (decían que era un Guillen Barret), a los 15 días de que empezó la enfermedad Dios los sanó, las fuerzas comenzaron a regresar a sus piernas y brazos, a los 30 días ya estaba completamente sano, el primer doctor que lo había revisado le dijo “esto es algo grande” esto sirvió para que Marcos decidiera ser bautizado en el nombre de Jesucristo. La hermana Luz cumplió con los 40 días de ayuno, aun cuando su hijo ya estaba sano. (Marcos sigue dirigiendo la alabanza).
Otro milagro que Dios hizo con el hijo del hermano Marcos Gaona en el 2005 fue el siguiente: Marcos y su papá trabajaban en un taller de reparación de llantas de camión, con el Gabriel Gaona Aguilar, tío de Marcos y hermano del pastor Marcos Gaona. Marcos estaba inflando una llanta que había reparado, (esa llanta era de un ring con aro, ese tipo de rines, si el aro no está bien puesto, botan y con la presión del inflado, golpean muy fuerte, de tal forma que matan si golpean a una persona). La llanta botó el aro y le pegó a Marcos en el antebrazo cerca de la axila, en ese momento Marcos se encontraba solo y fue otro trabajador que le avisó a su tío y a su papá lo que había sucedido, y no lo podían creer porque no le había pasado nada, decía Marcos que no le dolía nada, y su papá le dijo que Dios lo estaba llamando para que ya se bautizara.
Otro milagro que Dios hizo con el hijo del hermano Marcos Gaona en el 2005 fue el siguiente: Marcos y su papá trabajaban en un taller de reparación de llantas de camión, con el Gabriel Gaona Aguilar, tío de Marcos y hermano del pastor Marcos Gaona. Marcos estaba inflando una llanta que había reparado, (esa llanta era de un ring con aro, ese tipo de rines, si el aro no está bien puesto, botan y con la presión del inflado, golpean muy fuerte, de tal forma que matan si golpean a una persona). La llanta botó el aro y le pegó a Marcos en el antebrazo cerca de la axila, en ese momento Marcos se encontraba solo y fue otro trabajador que le avisó a su tío y a su papá lo que había sucedido, y no lo podían creer porque no le había pasado nada, decía Marcos que no le dolía nada, y su papá le dijo que Dios lo estaba llamando para que ya se bautizara.
También a su hija Dina de 16 años se le realizó una cirugía facial en el mes de Noviembre del 2005, después de un tratamiento de 5 años se llegó a la operación, el pastor y su esposa esperaban un milagro de Dios, pero Dios quiso  probar la confianza de ellos en Dios. El costo de la operación era 20,000 pesos, dinero que no se tenía pero Dios obró para que cobraran 12,000 y una hermana regaló 6,000 y otra hermana prestó otros 6,000, y Dios contestó la petición del pastor, la cual era que su hija no sufriera dolor, después de la operación Dina no tubo dolor ni en los días de recuperación hasta su completa recuperación.
También a su hija Dina de 16 años se le realizó una cirugía facial en el mes de Noviembre del 2005, después de un tratamiento de 5 años se llegó a la operación, el pastor y su esposa esperaban un milagro de Dios, pero Dios quiso  probar la confianza de ellos en Dios. El costo de la operación era 20,000 pesos, dinero que no se tenía pero Dios obró para que cobraran 12,000 y una hermana regaló 6,000 y otra hermana prestó otros 6,000, y Dios contestó la petición del pastor, la cual era que su hija no sufriera dolor, después de la operación Dina no tubo dolor ni en los días de recuperación hasta su completa recuperación.
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