Escuadrón 201, Coahuila
HISTORIA DE LA IGLESIA DE ESCUADRÓN 201
La Iglesia Apostólica de Escuadrón 201 inicia en el Ejido Hormiguero en un terreno donado por el Sr. Petronilo y su pastor fue el Rev. Ceferino Reza en aquel tiempo se congregaban en la Iglesia los hermanos Simón Torres, Evangelina, Francis I., Adela Ramírez, Gregoria Arguijo, Ma. Herrera, Eulogia, Jovita Silva Juárez, Teresa que era del Ejido el 20 de Noviembre junto con la hermana Josefa.
Cuando se retira el hermano Ceferino Reza le siguió el Rev. Juan Larriva y Juan Arreola, junto a estos pastores caminaba siempre los jóvenes Victoria, Inés, Raquel Carrillo y Rode. Evangelizaban en otros Ejidos, salían desde un día antes por la distancia que había y lo hacían transportándose en burros.
Para las campañas o actividades que se hacían en la 1° de Torreón, también se iban desde un día antes y se hospedaban en un sótano de esta iglesia.
De ahí continúo pastoreando el Rev. Pedro Castañeda este hermano comenzó en el Ejido Escuadrón 201, ya que el terreno del Ej. Hormiguero fue pedido por una familia a la que le pertenecía (hubo problemas de herencia). Estos pastores comenzaron en un terreno donado por la her. Lorenza Mora que estaba a pie de carretera del Ejido, los cultos se hacían en una enramada mientras el dueño les daba la instrucción de construir. La iglesia comenzó con solo 12 miembros en la iglesia, la mayoría viudas. En este tiempo se detuvo el evangelismo, para dedicarse solo a la construcción.
Después le siguió el hermano Rene durante 1 año, de ahí el Rev. Bartolo Gallegos tomó la congregación para continuar con la construcción del templo y motivo a los hermanos a seguir con la evangelización habiendo sólo 3 hermanas activas, las cuales a través de su gran esfuerzo y con la ayuda de Dios lograron tener un crecimiento de 6 bautismos más, esto en el año de 1983, en este lapso el Rev. Bartolo recibió una notificación en la cual decía que era necesario cambiar la congregación al Ej. La Unión, esto por tener pocos miembros, y lo que él hizo fue que continuo motivando a su ovejas para seguir en el evangelismo y hubo un gran crecimiento… estas 9 personas dispuestas a trabajar para la obra de Dios lograron que este cambio no se realizara y continuará la Iglesia en este lugar a lo cual le llamaron “Evangelización Explosiva”. A través del crecimiento la presencia de Dios bajaba en gran manera y uno de los milagros más grandes que se vio en ese tiempo fue la sanidad de la Her. María García, ella padecía de Cáncer pero al moverse la mano de Dios en ella, fue sanada. El pastor termino su trabajó en la obra de Dios por una enfermedad la cual lo llevo a la muerte.
Cuando esto sucede mandan al Rev. Pedro Castañeda Cardozo y hay un crecimiento, pero la mayoría de ellos eran jóvenes con grandes ministerios y con deseos de trabajar en la obra de Dios. Ellos estaban muy motivados y la convivencia era buena, estos jóvenes ayunaban desde las 5:00 am hasta las 6:00pm entregando su ayuno en el templo para después juntarse y comer todos juntos. Cuando los hermanos asistían a la dominical, asistían un gran número de personas, tenían clases desde Cuna hasta adolecentes y jóvenes, hasta damas y varones, todo con la motivación de asistir a prepararse para un futuro.
Con esto se recibió otro milagro grande, en cual un hermano que asistía a esta iglesia recibió sanidad. Él tenía SIDA, pero al igual, la mano de Dios se movió en él.
A él le continuó el Rev. Noé Escobedo, durante 1 año dio su servicio, en este lapso no hubo crecimiento, pero los hermanos no dejaban de predicar la palabra casa por casa, y se realizaban pequeñas campañas en el ejido, pero lo que si pasó es que como la Iglesia estaba a pie de carretera tenía que ser movida, porque la carretera la iban a hacer más ancha. La Iglesia se empezó a construir en el lugar donde está hoy en día, para ello todos los hermanos de esta congregación junto con el pastor se movilizaron para pedir ayuda al gobierno y construir lo más pronto posible el nuevo templo, se movían siempre en un camión amarillo q tenían, el cual después de tiempo fue vendido por falta de recursos y con lo recaudado se construyeron lo baños. Cuando se empezó a construir este templo, ya estando levantado cada hermano regalo una ventana para el edificio en construcción.
A él le siguió el Rev. Roberto Martínez, ya con el nuevo templo construido, el hizo bancas, cortineros para las ventanas junto con el acabado de la iglesia. Continuó con la evangelización por grupos familiares y se juntaban todos los hermanos a los cuales les gustaba llevar la palabra y se iban a otros ejidos.
Después el Rev. David Castro continuo con el pastorado pero solo estuvo por un corto tiempo, él era médico militar. Para este lapso la iglesia o congregación contaba con 100 miembros.
Enseguida de él, le siguió el Rev. Pedro Gómez, el trabajo de él solo fue para la construcción de la Iglesia más que en la evangelización, él puso el techo junto con el aire y ductos para comodidad de los miembros. Pero también con ello se descuidó a la Iglesia y empezó haber problemas, pues la congregación cayó en un “adormecimiento espiritual”.
Después continúo el Rev. Alfredo Torres y el lucho para tratar de despertar a esta congregación, aunque no lo logre por completo el lucho, hubo crecimiento en este transcurso de su pastorado.
El 20 de septiembre del 2002 el Rev. Luis Rodríguez Martínez, junto con su esposa la Her. Graciela Campa, recibieron la iglesia por voluntad de Dios y fueron llamados a este ministerio, ya que se tenía que iniciar un propósito de Sanidad Divina para poder despertar por completo a esta congregación. Esto se inició con fraternidades de dorcas y después con toda la iglesia.
En el área de construcción se ha logrado un comedor el cual ha servido para actividades de la Iglesia, una casa pastoral, la banqueta del comedor, poner vitropiso al templo y comedor, y el embardado para el inicio de un nuevo templo, que está en planes futuros.
En el proyecto de la evangelización comenzó con el proyecto de grupos familiares y campañas evangelisticas, pero se vio que no se tenían muchos resultados, con el paso del tiempo comenzaron los llamados “encuentros de Santificación” para esto la her. Graciela Campa fue la que comenzó con esta motivación, asistiendo aun encuentro en Guadalajara, de ahí comenzó a servir en los encuentros distritales, y junto con el pastor empezaron a mandar a líderes y hermanos para que se prepararan cada vez más. De ahí comenzaron los encuentros locales. El cual inicio su primer encuentro en la IAFCJ de Escuadrón 201 un 22 al 24 de Febrero del 2008. Hoy en día llevamos 18 encuentros en los cuales se ha servido siempre con un corazón dispuesto y sobre todo esperando las bendiciones de parte de Dios.
En este transcurso las células siguen trabajando con el proyecto de la nacional, sobre encuentros, pos-encuentros y re-encuentros. Motivando siempre a los amigos a asistir a través de las reuniones de alcance, desfiles de guerra y “fiestas del amigo”.
En el área de ministerios la IAFCJ de Escuadrón se ha dado a conocer porque de ella han salido grandes pastores como lo son: José Luis Arguijo, Roberto Sánchez, Miguel Acosta, Ricardo Rodríguez, José Coronado, Rubén Guerrero, Pablo Lira y Cruz Ángel de la Rosa. Así como el ministerio PENIEL que es el que sirve en cada encuentro, coordinado por la pastoral. Así como el ministerio de intercesión, dramas, alabanza, pandero, misericordia, restauración, entre otros, y se sigue buscando ministerios de poder. A través de estos se han tenido grandes resultados de crecimiento contando con más de 250 miembros que siempre han seguido la línea de lo proyectos nacionales. Motivando a líderes para que trabajen en la obra de Dios con los CLAI que son congresos de capacitación.
Aunque la Iglesia ha pasado por varia pruebas luchas de divisiones, difamaciones y rechazos, ha seguido de pie gracias a la ayuda de Dios y de un ministerio de soporte, que es el grupo de intercesión, que cada viernes realiza vigilias de oración toda la noche, pidiendo respaldo y deshaciendo toda obra del enemigo.
Ha transcurrido el tiempo en los cuales se ha dejado ver un semblante marcado por el trabajo y la huella del servicio, el precio del amor incondicional de entrega a la obra de Dios.
