Diferencia entre revisiones de «San Ignacio Río Muerto, Sonora»

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En el aspecto material organizó junto a sus feligreses la ampliación de la casa pastoral. Durante su trayecto pastoral logró  levantar la  cocina comedor, porche y en el patio de la parte de atrás la cocina de la iglesia; esto último quedó en obra negra; o sea sin engarres, piso ni ventanas. Con  este gran avance en lo material  se le dio más formalidad a la venta de comidas,  se equipó con mobiliario  apto de una cocina y con utensilios propios de una cocina económica. Durante su trayecto pastoral logró  levantar la  cocina comedor, porche y en el patio de la parte de atrás la cocina de la iglesia; esto último quedó en obra negra; o sea sin engarres, piso ni ventanas. Con  este gran avance en lo material  se le dio más formalidad a la venta de comidas,  se equipó con mobiliario  apto de una cocina y con utensilios propios de una cocina económica. Durante su trayecto pastoral logró  levantar la  cocina-comedor de la iglesia en el patio de la parte de atrás de la casa pastoral.  También el porche en la parte de enfrente de la casa. Esto  último quedó en obra negra; o sea sin engarres, piso ni ventanas. Con  este gran avance en lo material  se le dio más formalidad a la venta de comidas,  se equipó con mobiliario, por lo pronto  con lo más básico. Durante su estancia en este lugar tuvo a su cargo el  campo pesquero  Bahía de Lobos  dentro del programa Circuito Evangelizador, era un proyecto  de alcance espiritual. De  momento no había quien se hiciera cargo de aquel lugar.  Siendo  San Ignacio el lugar más cercano para predicar a  Bahía de Lobos aceptó la responsabilidad de ir a atender aquel lugar; continuamente se trasladaba a aquel lugar en su motocicleta para dar alimento espiritual a los hijos de Dios de aquel lugar y a las visitas que estaban siendo evangelizadas por ellos. Igualmente  brindaba su ayuda  en los  servicios de cultos.  Recuerda  que en una  ocasión estando al trasladarse  a Bahía de Lobos  en su motocicleta tuvo un  accidente en el que sufrió una herida en su pierna. La  lesión le duró meses para  sanar, lo que le impidió continuar atendiendo la Obra de Bahía de Lobos. Cuando se recupera de la lesión que le produjo el accidente, decide  solicitar a las autoridades su cambio pastoral  a Bahía de Lobos, para continuar su servicio en el ministerio en aquel lugar. Su solicitud es aprobada y  oficialmente  se le entrega la misión  de Bahía de Lobos.
En el aspecto material organizó junto a sus feligreses la ampliación de la casa pastoral. Durante su trayecto pastoral logró  levantar la  cocina comedor, porche y en el patio de la parte de atrás la cocina de la iglesia; esto último quedó en obra negra; o sea sin engarres, piso ni ventanas. Con  este gran avance en lo material  se le dio más formalidad a la venta de comidas,  se equipó con mobiliario  apto de una cocina y con utensilios propios de una cocina económica. Durante su trayecto pastoral logró  levantar la  cocina comedor, porche y en el patio de la parte de atrás la cocina de la iglesia; esto último quedó en obra negra; o sea sin engarres, piso ni ventanas. Con  este gran avance en lo material  se le dio más formalidad a la venta de comidas,  se equipó con mobiliario  apto de una cocina y con utensilios propios de una cocina económica. Durante su trayecto pastoral logró  levantar la  cocina-comedor de la iglesia en el patio de la parte de atrás de la casa pastoral.  También el porche en la parte de enfrente de la casa. Esto  último quedó en obra negra; o sea sin engarres, piso ni ventanas. Con  este gran avance en lo material  se le dio más formalidad a la venta de comidas,  se equipó con mobiliario, por lo pronto  con lo más básico. Durante su estancia en este lugar tuvo a su cargo el  campo pesquero  Bahía de Lobos  dentro del programa Circuito Evangelizador, era un proyecto  de alcance espiritual. De  momento no había quien se hiciera cargo de aquel lugar.  Siendo  San Ignacio el lugar más cercano para predicar a  Bahía de Lobos aceptó la responsabilidad de ir a atender aquel lugar; continuamente se trasladaba a aquel lugar en su motocicleta para dar alimento espiritual a los hijos de Dios de aquel lugar y a las visitas que estaban siendo evangelizadas por ellos. Igualmente  brindaba su ayuda  en los  servicios de cultos.  Recuerda  que en una  ocasión estando al trasladarse  a Bahía de Lobos  en su motocicleta tuvo un  accidente en el que sufrió una herida en su pierna. La  lesión le duró meses para  sanar, lo que le impidió continuar atendiendo la Obra de Bahía de Lobos. Cuando se recupera de la lesión que le produjo el accidente, decide  solicitar a las autoridades su cambio pastoral  a Bahía de Lobos, para continuar su servicio en el ministerio en aquel lugar. Su solicitud es aprobada y  oficialmente  se le entrega la misión  de Bahía de Lobos.


==MARIO OSORIO==
==MARIO OSORIO GARCIA==
'''El  15 de octubre 1987''', en un marco de gratos recuerdos lo recibe la Iglesia de San Ignacio como su nuevo pastor. Es el varón que ocupa el  '''lugar número diez''' en la historia del recorrer de la Iglesia Apostólica De La Fe En Cristo Jesús. Durante su periodo su principal prioridad fue trasmitir un verdadero caminar por las sendas de la fe,  inculcando a los creyentes a la oración como un  medio para facilitar el encuentro con Dios. Casado con la hermana Flora, llegan con el mismo objetivo de  trabajar para el Rey de Reyes y Señor de Señores. Iglesia y pastor experimentaron de una vida fraternal  con un fin común “Cristo Jesús”. Celebraron tiempos  maravillosos encontrarse con un Jesús vivo a través del mover del  llenura del Espíritu Santo y de su manifestar durante los momentos de oración e intercesión que se hacían a diario en el templo. Crecieron junto con la iglesia y practicaron  un compromiso teniendo claros los objetivos,  de una acertada formación cristiana, integral y cultivadora, buscando desarrollar actitudes que transmitieran la identidad apostólica. Mario Osorio fue un pastor que ejercitaba la oración diaria, esta disciplina  ya era practicada  por muchos  discípulos  de la iglesia,  otros tantos empezaron a levantarse en su relación diario con Dios por medio de la oración, lo que  propició un mover del Espíritu Santo que no se podía contener. Se  asegura que definitivamente  Dios respondió a las oraciones y se movió en respuesta. Esta pastoral  los llevó a  mantener su confianza en el Señor Jesucristo como una prioridad. Mario Osorio inculcó  que cuando se  ora apasionadamente y con propósito, de acuerdo a la voluntad de Dios, ¡Dios responde poderosamente! De  ésta época recuerdan los entrevistados que  fueron tiempos en que la iglesia era un ir y venir al templo para orar y  pasar momentos de entrega en donde se apreciaba la abundante  gracia de  Dios. En esta época se dio un avivamiento del Espíritu Santo. Dentro  de ese mover del Espíritu surgieron también  los Dones de profecías en esos momentos de oración, de tal forma que se e produjo un  derramamiento del Espíritu Santo  reflejándose un manifestar evidente de hablar en nuevas lenguas; ese gozo de la llenura del Espíritu se convertían en acciones concretas  mediante  las  actividades que se organizaban, el  entusiasmos y gozos eran muy notorios. La hermana Blanca Escobar una de las  entrevistadas  para la narración de la historia de la iglesia, testifica que el derramamiento  del Espíritu Santo provocó un despertar en el ánimo de la Iglesia. Las  campañas evangelizadores que se organizaban para testificar de Cristo.  En ellas se cantaba alabanzas de géneros diferentes, pero eso si todas eran de llamamiento para las almas oidoras de la Palabra.
'''El  15 de octubre 1987''', en un marco de gratos recuerdos lo recibe la Iglesia de San Ignacio como su nuevo pastor. Es el varón que ocupa el  '''lugar número diez''' en la historia del recorrer de la Iglesia Apostólica De La Fe En Cristo Jesús. Durante su periodo su principal prioridad fue trasmitir un verdadero caminar por las sendas de la fe,  inculcando a los creyentes a la oración como un  medio para facilitar el encuentro con Dios. Casado con la hermana Flora, llegan con el mismo objetivo de  trabajar para el Rey de Reyes y Señor de Señores. Iglesia y pastor experimentaron de una vida fraternal  con un fin común “Cristo Jesús”. Celebraron tiempos  maravillosos encontrarse con un Jesús vivo a través del mover del  llenura del Espíritu Santo y de su manifestar durante los momentos de oración e intercesión que se hacían a diario en el templo. Crecieron junto con la iglesia y practicaron  un compromiso teniendo claros los objetivos,  de una acertada formación cristiana, integral y cultivadora, buscando desarrollar actitudes que transmitieran la identidad apostólica. Mario Osorio fue un pastor que ejercitaba la oración diaria, esta disciplina  ya era practicada  por muchos  discípulos  de la iglesia,  otros tantos empezaron a levantarse en su relación diario con Dios por medio de la oración, lo que  propició un mover del Espíritu Santo que no se podía contener. Se  asegura que definitivamente  Dios respondió a las oraciones y se movió en respuesta. Esta pastoral  los llevó a  mantener su confianza en el Señor Jesucristo como una prioridad. Mario Osorio inculcó  que cuando se  ora apasionadamente y con propósito, de acuerdo a la voluntad de Dios, ¡Dios responde poderosamente! De  ésta época recuerdan los entrevistados que  fueron tiempos en que la iglesia era un ir y venir al templo para orar y  pasar momentos de entrega en donde se apreciaba la abundante  gracia de  Dios. En esta época se dio un avivamiento del Espíritu Santo. Dentro  de ese mover del Espíritu surgieron también  los Dones de profecías en esos momentos de oración, de tal forma que se e produjo un  derramamiento del Espíritu Santo  reflejándose un manifestar evidente de hablar en nuevas lenguas; ese gozo de la llenura del Espíritu se convertían en acciones concretas  mediante  las  actividades que se organizaban, el  entusiasmos y gozos eran muy notorios. La hermana Blanca Escobar una de las  entrevistadas  para la narración de la historia de la iglesia, testifica que el derramamiento  del Espíritu Santo provocó un despertar en el ánimo de la Iglesia. Las  campañas evangelizadores que se organizaban para testificar de Cristo.  En ellas se cantaba alabanzas de géneros diferentes, pero eso si todas eran de llamamiento para las almas oidoras de la Palabra.


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