Diferencia entre revisiones de «Ejido Uruapan, Baja California»

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El pastor invitó a un programa de oracíon en el templo, todos los días, de lunes a sabado, a las 10 de la mañana, era la cita, las hnas. no dejaban de asistir a orar diario, las oraciones parecían cultos, siempre se movía el Espíritu de Dios, fortalecía y animaba a los hnos.
El pastor invitó a un programa de oracíon en el templo, todos los días, de lunes a sabado, a las 10 de la mañana, era la cita, las hnas. no dejaban de asistir a orar diario, las oraciones parecían cultos, siempre se movía el Espíritu de Dios, fortalecía y animaba a los hnos.
Durante este pastorado se vivío un fuerte y bonito avivamiento, ya que en varias partes del distrito pasaba esto, algunos profetizaban, y esto traía cierta confusíon en algunos y firmeza en otros, ya que algunos decían que lo que pasaba eran cosas del diablo, pero otros tenían la seguridad que era Dios el que usaba a estas hnas. Hubo muchas bendiciones y sanidades en los cultos. este programa de oracíon se llevó a cabo durante todo este pastorado.
Durante este pastorado se vivío un fuerte y bonito avivamiento, ya que en varias partes del distrito pasaba esto, algunos profetizaban, y esto traía cierta confusíon en algunos y firmeza en otros, ya que algunos decían que lo que pasaba eran cosas del diablo, pero otros tenían la seguridad que era Dios el que usaba a estas hnas. Hubo muchas bendiciones y sanidades en los cultos. este programa de oracíon se llevó a cabo durante todo este pastorado.
LA LLAVE EN LA PIEDRITA: los hnos. que iban a la oracíon sabían que el que llegaba primero tenía que abrir el templo, para eso la llave del templo, se ponía en el hueco de una piedra, pero como la barda a un lado del templo era de piedras, para saber en cual hueco estaba la llave, esto solo lo sabían los que asistían a la oracíon y a las diversas reuniones que se hacían, así que cuando se le decía a un hno. que abriera el templo y el pedía las llaves, demostraba que no era muy constante en venir al templo. nadie tenía las llaves, siempre se dejaban en el hueco de esa piedra y se cubría con otra piedrita.     
LA LLAVE EN LA PIEDRITA: los hnos. que iban a la oracíon sabían que el que llegaba primero tenía que abrir el templo, para eso la llave del templo, se ponía en el hueco de una piedra, pero como la barda a un lado del templo era de piedras, para saber en cual hueco estaba la llave, esto solo lo sabían los que asistían a la oracíon y a las diversas reuniones que se hacían, así que cuando se le decía a un hno. que abriera el templo y el pedía las llaves, demostraba que no era muy constante en venir al templo. nadie tenía las llaves, siempre se dejaban en el hueco de esa piedra y se cubría con otra piedrita.