Diferencia entre revisiones de «3a Tlajomulco»

Mientras el hermano Óscar visitaba algunas familias por aquellas colonias, se dio cuenta que él tenía un departamento en la Colonia Lomas del Mirador, en la zona geográfica del sector 8, en Tlajomulco, así que comenzó a latir su corazón por aquellas comunidades y a ver la enorme necesidad que había del Señor en ese municipio. A mediados del año 2014, Dios comenzó a poner en su corazón comenzar una célula con los hermanos que vivían en Tlajomulco, así que pidió permiso al pastor Nicolás Herrera para hacerse cargo del sector 8 y comenzar dicha célula, con el plan a futuro para que esa célula se convirtiera en una misión y posteriormente en una iglesia viable. El pastor Nicolás aceptó tal petición y fue en ese momento que comenzó la célula en la Colonia Chulavista, etapa 6, en la calle Cerro Pico del Águila, número 112, en la casa de la hermana Irma Torres, quien muy dispuesta les facilitó a los hermanos de sus espacios, su baño, las sillas de su negocio de tacos y dos toldos. Los cultos eran sólo los días miércoles por la noche, así fue el acuerdo con el pastor Nicolás Herrera. Al principio las reuniones eran en su sala, pero llegó el momento en que ya no cabían las personas, por lo que se tuvieron que salir a la cochera y la banqueta para caber en los cultos de aquella célula que ya parecía misión. Gloria a Dios por ese comienzo.  

Los cultos estaban llenos del Espíritu Santo, que era lo más importante. El hermano Toño Sustaita se llevaba su estéreo y con una memoria USB se ponían los cantos para adorar al Señor. El predicador proclamaba la palabra de Dios a capela, sin bocina, sin micrófono. Pero una de las frases que más marcaron esos comienzos de la iglesia fue la siguiente: “Nos puede faltar todo, pero menos Su Presencia.” A veces no había música, no había bocinas, pero la presencia de Dios nunca nos faltó en cada reunión. Algunos de los cantos que más se entonaban en los comienzos fueron: “Tú harás” de Marcos Witt, “Enamórame” de Abel Zavala, “Cristo yo te amo” de Vino Nuevo, entre otros. Los hermanos bautizados que se reunían en aquella célula eran los siguientes: el encargado de la célula el hermano Óscar y su novia, en aquel momento, la hermana Noemí López; el matrimonio de los hermanos Antonio Sustaita y Claudia Martínez; el matrimonio de los hermanos Jesús Rivera y Gabriela Torres; la hermana Irma Torres y su esposo el hermano Óscar Brito, junto con sus hijos; la hermana Rosa Naranjo y sus hijas; también los hermanos Joe Beltrán y Lupita Rivera; la hermana Claudia Velázquez,  además de los oyentes que ya se tenían en aquella célula.  

'''Eventos de evangelismo.'''

Una vez limpio el parque, se comenzaron a prestar varios servicios a la comunidad de Chulavista; entre los servicios que se brindaron hubo corte de cabello gratis, atención médica y dental, juegos y dinámicas para niños. En el evento de evangelismo se presentaron obras de teatro, por parte del ministerio de la Tercera Iglesia, alabanza por parte de los alumnos del CREA, la predicación estuvo a cargo del ministro Óscar Pérez y al final se oró por los enfermos y se invitó a todos los oyentes a aceptar a Jesús en el corazón. Tuvimos una muy buena asistencia a este evento de impacto evangelístico. Alrededor de 90 personas nuevas asistieron a dicho evento, entre niños y adultos. Ahí se abrieron nuevos hogares para predicar la palabra de Dios.  

'''De novios a esposos.'''

Se le permitió al nuevo encargado de la misión dar unas palabras, así que aprovechó para agradecer a Dios primeramente, enseguida a sus padres, los hermanos Luz Sánchez y Miguel Pérez; también agradeció a su esposa Noemí y por supuesto a su pastor Nicolás Herrera por todo el apoyo en esos años de enseñanza y discipulado. Por último, agradeció a la Tercera Iglesia de Guadalajara. Así fueron enviados a fundar la iglesia en aquella zona de Tlajomulco.