Eleazar Reyes Rodríguez
El Hno. Eleazar Reyes Rodríguez, nació en la fronteriza ciudad de San Luis Río Colorado, Son., un 7 de abril, en un hogar cristiano. Su esposa es la hermana Silvia Guadalupe M. y sus hijos Eleazar, Elí Arcenio, Elioenai e Ismael.
Fue bautizado en agua el 4 de noviembre de 1973 por el Pastor Lucio Urías Sandoval en la Primera Iglesia de Hermosillo, Son. Allí mismo recibió el bautismo en el Espíritu Santo, el 15 de abril del mismo año.
En el área secular, estudió hasta el cuarto semestre de la carrera de Ingeniero Industrial Administrador, en la Universidad de Sonora y en la Facultad de Ciencias Químicas, pero debido a constantes huelgas que azotaron a las universidades en esa época, decidió irse a estudiar al ITAI ubicado en Tepic, Nay. Después inició su trayectoria en el ministerio, y ya no pudo volver a la universidad.
En el área ministerial, fue iniciado al ministerio el 13 de marzo de 1975 cuando sólo tenía diecisiete años, sus primeras tareas eran barrer el templo e instalar el equipo de sonido todos los días de culto. No tuvo oportunidad de predicar desde el púlpito hasta un año después; sin embargo, abrió un culto de barrio donde iniciaba, predicaba y despedía. Un ministro de la iglesia comenzó a apoyarlo, compartían el tiempo y logró su apoyo a tal grado que hasta lo convirtió en su suegro al casarse con su hija.
El 22 de abril fue ordenado al ministerio en la Convención del Distrito de Sonora, presidiendo la ceremonia el hermano Isidro Pérez Ramírez. Ayudó desde entonces a varios pastores como asistente, guardando un especial recuerdo del pastorado del hermano Jesús Ramos Santos, de quien fue asistente por espacio de cinco años y hasta hoy conserva una íntima amistad con él.
Recién egresado del ITAI fue designado para pastorear la pequeña iglesia de Benjamín Hill, Son. Tenía entonces veintidós años y estaba recién casado. Se sentía un poco desubicado, pues el hermano más joven de esa congregación tenía cincuenta años. Sin embargo, logró adaptarse. Al año de haber asumido este pastorado solicitó permiso para separarse de la responsabilidad por un tiempo para hacerse cargo de sus padres. Su padre para esa época ya no pastoreaba y no tenían un lugar propio para vivir y trabajó para sostener a sus padres y conseguirles un hogar en donde pasaran su vejez. Dios lo bendijo grandemente, pues sin tener experiencia laboral alguna, le dieron trabajo como empleado de mostrador de una de las más grandes ferreteras de Hermosillo; a los seis meses lo hicieron jefe de mostrador, al año ya era jefe de piso y cuando se retiró era gerente de compras.
Seguramente todo era un plan de Dios, pues el trabajar en una empresa secular le enseñó a asumir compromisos, a luchar por la superación, a formarse hábitos de trabajo y a ser más responsable. Luego de diez años de trabajar en la ferretería, volvió a pastorear.
En 1988 asumió el pastorado de la Tercera Iglesia de Hermosillo, y Dios le concedió una buena cantidad de bautismos y durante este pastorado se empezaron los trabajos para levantar la obra en Nacozari, Son.
En 1991 recibió la iglesia y el presbiterio de Caborca, Son., en medio de un gran problema entre el pastor anterior y la congregación; sin embargo, el Señor obró y se logró fortalecer esa congregación, así como darle forma a lo que hoy es la Segunda Iglesia de esa ciudad.
En 1994 fue electo Obispo Supervisor del Distrito de Nogales, y al mismo tiempo, se fue a pastorear la Primera Iglesia de Nogales, en la que estuvo por espacio de ocho años. Nuestro hermano conserva un gran cariño y respeto hacia esta congregación. Al entregar, dejó fundadas siete iglesias y un campo de evangelismo distrital, que después sería la octava, en esa ciudad.
Como Obispo, el Señor lo usó para su gloria, pues al recibir el cargo, Nogales era un distrito muy pobre en todos los aspectos, y después de seis meses podía ser considerado un distrito fuerte económicamente. A los cuatro años, además de la mejora económica, se había doblado el número de iglesias y también el de miembros. Fue reelecto para un segundo periodo y se propuso consolidar lo alcanzado y crecer lo más posible.
En la Convención General del 2002, nuestro hermano Reyes fue electo Secretario de Evangelización, cargo que desempeñó satisfactoriamente hasta el final, y en la pasada Convención General fue electo como Secretario de Misiones Internacionales, lo cual según él mismo afirma, es un alto honor, una responsabilidad inesperada y todo un reto personal., pues su capacidad de servicio y liderazgo serán puestas a prueba.
En el año de 2006, fue elegido en Convención General como Secretario de Misiones Internacionales, después de terminar su periodo en el año 2010, fue electo como Obispo Presidente de nuestra amada iglesia.